"Ing. Enrique Martín Hermitte"
Soberanía y Seguridad Jurídica Popular
| Artículos de opinión
Autor | Belen Ennis,
Conflictos de Interes
La autora no manifiesta conflictos de interés
Palabras Claves
Aranguren, Argentina, audiencia pública, Chile, FMI, interpelación, mentira, relato macrista, Rusia, subsidios, subsidios a la energía, tarifazo
07-09-2016 |
En su interpelación ante la Cámara de Diputados, y en otro manotazo de ahogado por intentar justificar el tarifazo energético y la quita de subsidios a los combustibles fósiles, el accionista de la Royal Dutch Shell y ministro de Energía de la Nación volvió a manipular datos, tal y como fuera demostrado por este Observatorio días atrás en relación al informe del CEDLAS (ver bibliografía). En esta oportunidad, encontramos que basándose en un informe del Fondo Monetario Internacional (FMI) sobre los subsidios energéticos, Aranguren no sólo brindó información falsa acerca del nivel de subsidios en el mundo y ubicó mal a la Argentina en el ranking global sino que aseguró falsamente que en Chile no se subsidia ningún tipo de energía y que un gigante industrial como Rusia pagaría apenas unos 91 dólares más que nuestro país en subsidios a los combustibles fósiles. Sin embargo, nada de esto se condice con los datos brindados por el organismo internacional. Es más y ya que el ministro-accionista se basa en el FMI, cómo no remarcar que los subsidios cayeron entre 2013 y 2015 un 39% según el Fondo. Aranguren oculta información y miente; pero si nuestro Observatorio expone la falacia es en realidad el FMI quien lo desmiente. ¿Se retractará el ministro luego de leer este informe? Sabemos que nos lee…
Los subsidios energéticos en el mundo
El informe del FMI en cuestión se titula "Contando el costo de los subsidios energéticos" (2015) y fue oportunamente analizado por este Observatorio en respuesta a las mentiras que el periodista Jorge Lanata manifestara acerca de la inexistencia de una política de subsidios en el mundo (ver bibliografía). Al respecto, y tomando como base el informe aludido, desde OETEC remarcábamos que los países del G-20 pagaban más de 1.000 dólares per cápita en subsidios a los combustibles fósiles. En consecuencia, mientras EE.UU. abonaba 700.000 millones de dólares al año en subsidios a la energía, lo que representaba 2.180 dólares por persona; Australia, a su vez, otorgaba 1.260 dólares per cápita para subsidios energéticos; y que el Reino Unido destinaba 41.000 millones de dólares en subsidiar las energías convencionales, lo que equivalía a 635 dólares por cada ciudadano.
En igual sentido, destacábamos que los países con mayor nivel de subsidios a los combustibles fósiles al año y por persona eran los estados petroleros del Medio Oriente: en Qatar llegaban a los 6.000 dólares, en Arabia Saudita 3.400 dólares y en Emiratos Árabes Unidos 3.000 dólares por cabeza. Finalmente, informábamos que según el FMI los subsidios energéticos eran significativamente importantes a nivel nacional en todo el mundo -casi el mismo porcentaje que se derivaba para gastos en materia de defensa- en comparación con el PBI: en los EEUU. (3,8%), en Australia (2,0%) y en el Reino Unido (1,4%). Por su parte, los subsidios eran aún mayores en proporción al PBI en países como China (20%), India (12%) y Ucrania (60%). Asimismo, subrayábamos que la Argentina destinaba el 3,2% de su PBI en subsidiar la energía, apenas por debajo del 3,8% de los Estados Unidos.
Los subsidios energéticos en la Argentina
Tomando como base el referido informe del Fondo, el accionista de la Royal Dutch Shell y ministro de Energía y Minería de la Nación manifestó ante las comisiones parlamentarias lo siguiente: "En esta filmina -cuya fuente es el Fondo Monetario Internacional de 2015- pueden observar que Argentina figura en el puesto 18, con un subsidio per cápita nominal de 207 dólares". ¿Verdadero o falso? Falso. Veamos por qué.
En primer lugar, el estudio en cuestión no divide a los países en ningún ranking numérico sino que los agrupa bajo las siguientes categorías: a) avanzados; b) comunidad de Estados independientes; c) emergentes y en desarrollo de Asia; d) emergentes de Europa; e) América Latina y el Caribe; f) Medio Oriente, África del Norte y Pakistán; y g) África Subsahariana. Asimismo, dentro de cada una de estas categorías, los Estados son ordenados de forma alfabética, sin importar el monto de subsidios que destinan a la energía. En segundo lugar, en la Argentina el subsidio per cápita nominal a la energía es de 413 dólares -o por lo menos así lo era antes del 10 de diciembre de 2015- y no de 207 dólares como informó el Sr. Aranguren en Diputados. Como se observa en la siguiente ilustración extraída del informe del FMI, el total de los subsidios se divide en 13 dólares per cápita para el petróleo; 15 dólares para el carbón; 211 dólares para el gas natural; y 173 dólares para la electricidad, totalizando unos 413 dólares.
Fuente: Fondo Monetario Internacional.
¿De dónde fue que Aranguren tomó los 207 dólares per cápita? Total incógnita mas no una ingenua. Evidentemente tomó el informe que más le conviene a su posición, con el agravante que siquiera se trata del último. Manipular la información de esta manera para acomodarla a un relato específico es sumamente grave.
Ahora bien y como podrá apreciar el lector atento, el valor que nosotros informamos (más alto en comparación al expuesto por Aranguren) hubiese resultado más ventajoso para el razonamiento mercadista del accionista de la Royal Dutch Shell y su argumentación anti-subsidios. Sucede que lo que es incorrecto es ese ranking que nos ubica en la posición 18, cuando en realidad estamos muy por debajo, posición 43 (per cápita). De todas maneras y como señalamos en informes pasados, específicamente en nuestro análisis del fallo de la Corte Suprema en relación al tarifazo gasífero (ver bibliografía), para OETEC los subsidios a la energía son directamente proporcionales al bienestar social y económico de una Nación, tal y como demuestran justamente las naciones más desarrolladas del globo. Vale la pena recordar el contundente gráfico de abajo:
Fuente: Elaboración propia en base a datos del FMI "How Large are Global Energy Subsidies?" (2015). La escala es logarítmica. Los subsidios no incluyen a las energías renovables eólica y solar.
Se aprecia claramente que los países con los mayores subsidios a la energía per cápita, salvo excepciones y cuya explicación quedará para otra oportunidad, son los países con el mayor desarrollo económico de su producto por persona. Resulta evidente la dirección que debe tomar el Presidente en materia de subsidios energéticos si lo que desea es aproximarse al Primer Mundo.
¿Cuánto paga Rusia en subsidios a la energía?
"Rusia está en la posición 13, con 298 dólares per cápita", afirmó Aranguren ante los diputados. No obstante, en el estudio del FMI los países no están ordenados numéricamente, por lo que Rusia no pude ostentar ningún "puesto 13". La posición depende de una clasificación que en este caso desconocemos cuáles fueron sus criterios de ordenamiento. En cuanto a los supuestos 298 dólares que este país destinaría por cabeza para subsidiar los bienes energéticos, ¿correcto o incorrecto? Absolutamente incorrecto. Siguiendo la información del Fondo, el subsidio nominal per capita a la energía en Rusia no es de 298 dólares sino de 2.334. Como se observa a continuación, publicado por The Guardian en base a datos del FMI, este monto supera incluso a los 2.177 dólares que Estados Unidos paga por cabeza en subsidios a los combustibles fósiles.
Por otra parte, si Aranguren hubiera querido referirse sólo a los subsidios eléctricos, los números tampoco cierran. Rusia otorga 232 dólares por persona para subsidiar la electricidad. Pero démosle un crédito más al ministro. Teniendo en cuenta que el motivo principal de su interpelación en Diputados fue el precio del gas natural y el tarifazo gasífero, podríamos pensar que Aranguren intentaba divulgar qué montos derivaba Rusia para subsidiar dicho bien energético. Pues bien, sucede que los rusos pagan 489 dólares por cabeza en subsidios al gas natural.
En suma, nadie en su sano juicio podría aventurar que Rusia, una nación que cuenta con un aparato productivo, industrial y militar ultra-desarrollado, pueda gastar apenas unos 298 dólares per cápita en subsidiar la energía. Nadie, a excepción del ministro Aranguren, que en su derrotero de mentiras siquiera es capaz de detenerse en las barbaridades que comunica. Es que siguiendo los datos que él mismo brindó, un gigante industrial como Rusia pagaría tan sólo unos 91 dólares más que la Argentina -siguiendo al ministro serían unos 298 dólares de Rusia contra 207 de Argentina-, siendo que nuestro país aún se encuentra en vías de desarrollo y no ha podido superar el lastre de su estructura agropecuaria. En definitiva, una escandalosa y vergonzosa aseveración.
¿De dónde fue entonces que Aranguren obtuvo los datos que expuso en el Parlamento? Desconocemos, aunque resulta evidente que es el propio FMI quien lo contradice. Y no solo lo contradice en cuanto a rankings y valores, sino que incluso perjudica sobremanera la posición de eliminar subsidios en nombre de un gobierno (el anterior) que venía incrementándolos de forma supuestamente escandalosa.
¿Fiesta de subsidios?
Sin ponerlo en estas palabras, lo que el accionista de la Royal Dutch Shell pretendía demostrar en su alocución era más o menos esto: "La Argentina venía de una fiesta de subsidios según el Fondo". Ahora bien, nótese lo que el informe del FMI permite concluir al realizar una simple comparación entre los valores de 2013 y 2015 en materia de subsidios a la energía para la República Argentina: una reducción del 93% en el subsidio al petróleo, seguido por un 26% de reducción a la electricidad, 19% al carbón y un 11% al gas natural.
Fuente: Elaboración propia en base a datos del FMI.
Es decir, un desplome del 39% promedio entre 2013 y 2015. Dicha evolución contradice los argumentos de la administración macrista que señalaban un incremento descontrolado de los subsidios en los últimos años de gobierno kirchnerista.
El caso chileno (en contra del mercadismo energético argentino)
Las mentiras divulgadas por el accionista de la Royal Dutch Shell y ministro de Energía de la Nación no fueron inocuas. La falaz exposición del esquema de subsidios globales por parte de Aranguren tenía un claro objetivo político: presentar un modelo plausible de imitación para la Argentina. Y en este sentido se refirió puntualmente al modelo de subsidios chileno.
"En la parte inferior pueden ver la posición de los países de Latinoamérica… En el caso específico de Chile no tiene subsidio a la energía", expresó Aranguren en su alocución. ¿Es verdad que no existe una política de subsidios energéticos en el país trasandino? No. Completamente falso. En primer lugar, tenemos que el porcentaje de subsidios en relación al PBI es de 3,32%, unas centésimas por encima del argentino que se encuentra en el 3,25%.
Fuente: FMI.
En segundo lugar, Aranguren debería haber explicado, ya que de Chile hablamos, que según el FMI los subsidios a la energía en el hermano país son en realidad superiores al nuestro, no sólo como porcentaje del PBI sino también en cuanto a su incidencia por persona: 515,08 dólares contra 413,08.
En tercer lugar, el gráfico que sigue debería haber utilizado en su interpelación para encuadrar a la Argentina en América Latina sin faltar a la verdad:
Fuente: FMI.
Y en cuarto y último lugar, si bien es cierto que Chile no subsidia el consumo de electricidad, tanto el petróleo como el carbón y el gas natural reciben subsidios diferenciales por parte del Estado: 397 dólares, 92 y 25 dólares por cabeza, respectivamente. Cabe tener en cuenta, en este sentido, que el subsidio a la electricidad viene dado en este caso e indirectamente por el subsidio al petróleo y al carbón, combustibles claves de la matriz secundaria. ¿Cierto esto que afirmamos? Por supuesto. Aranguren debería leer los informes de su flamante asesor y ex secretario de Energía de Fernando De la Rúa, Daniel Montamat, en relación a Chile. Citamos textual de un artículo publicado por Infobae en 2007, pero que no ha perdido vigencia desde que la matriz chilena no ha registrado mayores cambios desde entonces: "Cuesta un 400% más [la electricidad] que en Argentina y casi el doble que en Colombia, Perú y Brasil, lo que la convierte en la más cara de América Latina. Así lo reveló un estudio de la consultora Montamat & Asociados… El informe de Montamat sintetiza las razones del alto costo: por el uso de diesel o carbón, combustibles que Chile debe importar y porque el Estado no subsidia los precios de la electricidad"(ver bibliografía).
Conclusiones
La verdad es que no puede haber mejor síntesis para el despertar de un razonamiento popular en relación a la energía que a partir de los datos provistos por Montamat, en relación a Chile y cruzándolos tanto con el informe del FMI como con las mentiras del ministro-accionista: el problema de un sistema energético no viene dado por su nivel de subsidios -como no quieren hacer creer el mercadismo- sino por un sistema con precios inaccesibles para la población y la industria (peor aún si encima, como en el caso de Chile, se carezca de subsidios a la electricidad aunque sí a sus principales combustibles). Es más, menos subsidios a la energía no implica más desarrollo sino menos.
Consecuencia de décadas de neoliberalismo, el país trasandino vive sumido en una crisis energética hace ya varios años desde que no puede proveer a su población con un suministro constante y seguro de energía y a precios asequibles. "La dependencia de materias primas energéticas extranjeras, que alcanzan a un 60% de su energía primaria (datos del Ministerio de Energía chileno a 2014) es una de las principales razones que lo hacen subordinarse a la inestabilidad y volatilidad de los precios en los mercados internacionales y a las restricciones de abastecimiento que se produzcan por fenómenos políticos, climáticos o de mercado", explico al OETEC el especialista en energía Diego Mena Costa (ver bibliografía).
El mercadismo rechaza un sistema energético subsidiado porque cuando ello ocurre es porque la energía y la electricidad tienden a convertirse en servicios públicos de acceso universal (accesibles y asequibles), promotores del desarrollo, la industrialización y una mejora creciente en la calidad de vida de la población. Las mentiras de Aranguren aquí expuestas -agravadas por el hecho de falsificar la mismísima fuente utilizada y que encima perjudica la médula de su argumentación- no hacen sino demostrar el nivel de desesperación del mercado dispuesto a todo con tal de aplicar un tarifazo genocida en lo social y económico.
Bibliografia
FMI. (2015). Contando el costo de los subsidios energéticos
http://www.imf.org/external/pubs/ft/survey/so/2015/new070215a.htm
The Guardian. (04/08/2015). "G20 countries pay over $1,000 per citizen in fossil fuel subsidies, says IMF" https://www.theguardian.com/environment/2015/aug/04/g20-countries-pay-over-1000-per-citizen-in-fossil-fuel-subsidies-say-imf
OETEC (26/07/2016) Argentina: ¿Único país del mundo que subsidia la energía? El FMI desmiente a Lanata http://www.oetec.org/nota.php?id=1965&area=1
OETEC (29/08/2016) La notable omisión de Aranguren respecto de los subsidios energéticos
http://oetec.org/nota.php?id=2034&area=1
OETEC (20/08/2016) Análisis del OETEC sobre el fallo de la Corte Suprema en relación al tarifazo del gas
http://www.oetec.org/nota.php?id=2023&area=1
OETEC (18/07/2016) El Ministerio de Energía confirma que el tarifazo gasífero es una aberración
http://www.oetec.org/nota.php?id=1933&area=1
OETEC (13/07/2016) Diputada del Frente Renovador basa denuncia a Aranguren en informe del OETEC
http://www.oetec.org/nota.php?id=2015&area=1
OETEC (06/06/2014) Chile vive una crisis energética hace unos diez años http://www.oetec.org/nota.php?id=500&area=1
Infobae. (07/04/2007): "Chile produce la electricidad más cara de Latinoamérica": http://www.infobae.com/2007/04/07/310238-chile-produce-la-electricidad-mas-cara-latinoamerica/