ÁREAS de
INVESTIGACIÓN

Energia

| Artículos de opinión

YPF, la política y los destinos del país

Autor | Federico Bernal


Conflictos de Interes
El autor manifiesta conflictos de interés: el amor por YPF.


Palabras Claves
downstream, mercado de combustibles, Oil Combustibles, producción de petróleo, refinería La Plata, refinerías, renacionalización, Shell, upstream, YPF



20-03-2014 | Señoras y señores de la oposición: por el bien de YPF (que es empresa y patrimonio del pueblo argentino, ergo, también suya) tengan a bien recibir estas líneas en clave propositiva. Insostenible e injusta resulta vuestra ausencia de comunicados y/o manifestaciones a favor de la notable evolución registrada por Yacimientos Petrolíferos Fiscales desde el 16 de abril a la fecha. Semejante logro no puede soslayarse ni enmudecerse. Podrán no coincidir Uds. con el cierre dado al proceso de renacionalización. Ahora, censurar a la opinión pública, a sus propios seguidores y al mundo entero los resultados que la gestión pública de YPF lleva producidos en apenas 24 meses resulta vergonzoso. ¿Qué dirá occidente de vuestro comportamiento? Una alta fuente de la Casa Blanca, al decir de Mariano Obarrio, confió a este cronista su sorpresa ante el "nivel de estupidez de la derecha y la izquierda argentinas que rechazan YPF, empresa que les dará de comer en 2015 cuando el populismo K haya terminado para siempre". Por todo esto, por la vergüenza ajena que nos provocan, hemos decidido resumir números y conceptos claves vinculados a YPF y al sector hidrocarburífero caso decidan cambiar la politización y mezquindad con la que tratan la cuestión energética por una que apueste al conjunto social y nacional, más allá de colores partidarios, ideologías y proyecciones de intención de voto.


Mercado de combustibles
YPF participa con el 51,2% de la capacidad instalada del parque argentino de refinación. Cuenta con tres refinerías: La Plata, Luján de Cuyo y Plaza Huincul. Le siguen muy detrás: Shell (15,9%), Axion (13,8%), Oil Combustibles (8%), Petrobras (4,9%) y Refinor (4,2%), cada una con una sola refinería. A propósito, cabe recordar que de las ocho refinerías más importantes del país -las cuales a su vez explican el 98% del total de elaboración de combustibles a escala nacional- cinco de ellas fueron construidas por YPF Sociedad del Estado. Ahora pasemos a la elaboración de combustibles para las principales seis empresas de refinación en 2013. En cuanto al primer aspecto, YPF registró una caída de 2,1% interanual debido al incendio de la refinería de La Plata de abril de 2013. Pero mientras que en La Plata la elaboración de combustibles líquidos declinaba 8,2%, en las refinerías de Luján de Cuyo y de Plaza Huincul se incrementaba en 6,4% y 5,1%, respectivamente. Es decir, un promedio, entre las dos refinerías "sanas" del 5,75%. ¿Qué sucedió con las restantes firmas? Shell aumentó 3,9%, AXION disminuyó 1%, Oil Combustibles ascendió 1,9%, y Petrobras y Refinor incrementaron sólo 0,7% y 0,1%, respectivamente. En suma, la elaboración de combustibles por parte de YPF casi duplicó la de Shell, multiplicó por seis la de Axión y superó ampliamente las de Oil Combustibles y Petrobras. En un país cuya demanda de combustibles sigue en ascenso y sus precios se corrigen al alza, no se explica el bajísimo incremento en la elaboración de combustibles por parte de las refinadoras privadas y Petrobras. ¿La oposición tiene algo para decir al respecto?

Refinación y factor de utilidad
Hace muy bien el especialista y director técnico del OETEC (www.oetec.org), Ricardo De Dicco, en observar que YPF tuvo un factor de utilidad (FU) promedio de sus refinerías del orden del 86,2% (77,6% La Plata por el siniestro explicado antes) mientras que 98,5% Luján de Cuyo y 98,3% Plaza Huincul. En otras palabras, fueron estas dos refinerías de YPF las que alcanzaron los mayores FU del parque de refinación argentino en 2013. Por su parte, Shell, el segundo agente económico en capacidad instalada, un 84,2%. Ahora bien, al medir la participación de mercado por volumen procesado, Shell se estanca y pasa a compartir el segundo lugar con Axion. De no haber sido por el siniestro de la refinería de La Plata, el FU de YPF hubiera superado en aproximadamente un 15% al de Shell. Si las refinerías de YPF trabajan a pleno, con apenas un 1,5% máximo de capacidad ociosa (en condiciones normales), ¿por qué Shell, Oil Combustibles y Refinor no pudieron hacer lo mismo? Evidentemente aumentar sus utilidades a través de un aumento proporcional en la elaboración de productos refinados no es prioritario para estas compañías. ¿Será porque les resulta más beneficioso importar o especular con la instalación de precios internacionales? YPF aumentó sus ventas en 3,5% (algunas ventas de subproductos derivados también fueron afectadas por el incendio en la refinería La Plata), mientras que Shell casi duplicó esa cifra, con un 6,7% interanual. ¿Positivo? No, pues mantuvo deprimido su FU en un 15% (contra un promedio del 1,5% de ociosidad para las dos refinerías sanas de YPF) y si bien procesó un 7,2% más de petróleo que en 2012, los subproductos más beneficiados fueron aerokerosene (24,1% interanual) y nafta ultra (5,2%), siendo los más perjudicados los que más hacen falta elaborar: súper (apenas 0,4%) y gasoil (-1,7%). En función de una capacidad ociosa injustificada del orden del 10,5% entre 2008 y 2013, Shell dejó de elaborar 1.091.966 metros cúbicos, lo cual se tradujo en pérdidas para el país por 769.200.859 dólares que podrían haberse evitado. Señoras y señores opositores: ¿Por qué nada de nada de semejante daño?

Upstream y Vaca Muerta
Hemos analizado en notas anteriores el lamentable comportamiento de la oposición ante la ostensible recuperación hidrocarburífera de YPF. En realidad, doblemente lamentable, puesto que más importante que el incremento de la producción, a su vez consecuencia del aumento exponencial de las inversiones, es el creciente y protagónico rol de YPF como empresa pública testigo. YPF fue la única petrolera que registró tasas interanuales positivas de producción de crudo entre 2013 y 2012: 3,1% respecto al año anterior, cuando PAE, Sinopec, Pluspetrol y Petrobras declinaron 4%, 2,5%, 6,9% y 7,1%, respectivamente. Si tomamos enero de 2014 con datos ya provistos por Secretaría de Energía, advertimos que YPF lidera el ranking petrolero con un incremento en relación a igual mes de 2013 del orden del 9,8%. A propósito es justo destacar que Pluspetrol y PAE registraron cifras positivas por 4,1% y 1,9% respectivamente. Sin poder hacer conclusiones a futuro, no deja de ser interesante el incremento de la producción nacional de crudo en enero, en 1,3%. ¿Quién explica la suba? En gas natural la diferencia es aún mayor. De las principales siete operadoras, solamente dos de ellas mostraron incrementos en la producción: YPF con 9,2% y Apache Energía Arg. con 2,1% (recordar que Apache quedó en manos de YPF recientemente). La firma Total Austral, la primera productora gasífera, cayó 1,9% y PAE, la tercera, 4,6%. Señoras y señores de la oposición tan consternados por las importaciones gasíferas: ¿ningún comunicado que merezca contrastar la actuación de la empresa pública con la de las restantes firmas? ¿Acertada la compra de Apache? ¡Sírvanse de YPF como empresa pública testigo! En relación a la consolidación nacional, regional e internacional de YPF en Vaca Muerta, por cierto, que hemos notado mucho les preocupa, vaya una idea: ¿se imaginan lo bien que le harían a la petrolera nacional si por ejemplo todas las embajadas en la Argentina y consulados nuestros en terceros países recibieran una comunicación de las principales fuerzas opositoras invitando a las empresas petroleras extranjeras a asociarse a nuestra eficiente empresa de hidrocarburos de bandera? La señora Carrió, curtida en el ejercicio postal con representaciones extranjeras en la República, cuenta en su haber con los contactos de todas las embajadas.

YPF y la reasignación institucional para una Argentina popular y democrática
Una empresa de control y gestión pública con poder de empresa testigo en el sector de su competencia constituye el peor enemigo del neoliberalismo (de una Argentina atrasada y dependiente). Al igual que en tiempos de una YPF bajo control estatal, la YPF renacionalizada se constituye como la mejor herramienta de reaseguro de la seguridad jurídica popular en el marco de la libre y "sana" competencia. A esto se refería Galuccio cuando afirmó a los senadores la semana pasada en el Congreso: "estamos haciendo lío en la industria petrolera". La renacionalización de YPF fue celebrada por el pueblo argentino en su conjunto y es, con las Malvinas, una de las pocas cuestiones -por no decir las únicas- que realmente conmocionan al pueblo argentino y lo llevan a estrechar filas en su defensa dejando de lado distinciones partidarias e ideológicas. Con YPF el sentido común se funde con el sentido nacional. Por tales motivos, se entiende que la oposición política no halague ni distinga la gestión pública, pues sería reconocer indirectamente al gobierno nacional en una causa que despierta pasión y apoyo unánime en la sociedad. Como sea y porque no perdemos esperanza de una oposición madura y responsable, les sugerimos el siguiente comunicado dirigido al pueblo argentino y mundial: "YPF bajo administración pública, desde el 16 de abril de 2012 a la fecha demuestra estar a la altura del desafío y las necesidades energéticas de la República Argentina. Demuestra, asimismo, ser el mejor socio para las inversiones requeridas por el tercer potencial shale del planeta. En este sentido, nuestro partido político propone se incremente la participación de YPF en Vaca Muerta, hoy restringida al 30%. Por otra parte, el incremento de crudo, gas y combustibles resultan estratégicos para el país, opinión que parecerían no compartir las firmas de control privado (más Petrobras). Instamos pues, a todas las operadoras del segmento del upstream y del downstream a seguir los pasos de YPF. En el actual panorama económico, y avivado por el incremento del consumo, se comprueba la factibilidad y compatibilidad entre la reinversión de una parte sustancial de las utilidades y el incremento de la producción de hidrocarburos (convencional y no convencional), el aumento del factor de utilización de las refinerías y la generación de ganancias y dividendos para sus accionistas. Si YPF, que vende combustibles al menor precio de mercado puede hacerlo, no existen motivos para que las firmas privadas y Petrobras no lo hagan. Por último y más allá de las diferencias que mantenemos que con el gobierno nacional, YPF vuelve a ser orgullo del pueblo argentino y la Patria toda. Celebramos esta nueva etapa de gestión pública de nuestra querida petrolera de bandera y la exhortamos a que prosiga en esta dirección". Utopía de lado, una última reflexión: YPF viene a legitimar al sector público argentino tan saboteado y bastardeado entre 1976 y 2002. La confianza pública se desplaza de soluciones privadas o mercadistas hacia el ámbito estatal, esto es, uno verdaderamente popular y por ende, efectivamente democrático. Estamos en presencia de una reasignación institucional más que positiva de las responsabilidades y los procesos básicos de decisión, gestión y funcionamiento del país: del mercado al Estado, del interés individual al colectivo, de la dependencia a la soberanía.



Bibliografia
- Informe Indicadores Energéticos de la Argentina (Ricardo De Dicco, OETEC).