La semana terminó con la agresión de los estrados judiciales, a la soberanía energética del país cuando dio a conocer la resolución de una juez de NY USA, al reclamo de los fondos buitres. "El gobierno argentino apelará inmediatamente el fallo de la jueza Loretta Preska. El presidente Alberto Fernández, analizó la cuestión con la Procuración del Tesoro. Seguiremos defendiendo la soberanía energética y nuestra empresa estatal YPF frente a los fondos buitres." Advierte la portavoz presidencial argentina, Gabriela Cerruti.
Respecto a esta situación, en la agencia de noticias Télam, detallan: "La jueza Preska determinó este mediodía que la Argentina deberá pagar un resarcimiento por daños económicos al fondo Burford Capital.

En la misma línea que lo informado por Cerruti, el estudio de abogados Sullivan & Cromwell, que representa a Argentina en la demanda de Burford Capital, manifestó "su desacuerdo con la decisión sin precedentes y errónea de la corte de distrito" de Nueva York y ratificó "la intención de apelar la sentencia".

Al respecto, el abogado Robert Giuffra, socio del estudio Sullivan & Cromwell, aseguró que "la sentencia dictada en materia de daños y perjuicios refleja la incomprensión fundamental de la corte de distrito respecto del derecho argentino aplicable y exacerba otros errores graves de derecho argentino que la corte ya cometió en instancias anteriores del caso".

"Este litigio, que versa sobre los derechos de ex accionistas de una sociedad argentina bajo los estatutos de esa sociedad argentina no debería tramitar en un tribunal de EE.UU., en particular cuando el derecho argentino vigente exige que este tipo de controversias sobre derecho argentino deben ser decididas por los tribunales argentinos", agregó Giuffra en una nota de prensa."

Cabe recordar que en marzo de este año se dio a conocer la acción judicial de la jueza del Segundo Distrito Sur de Manhattan (Nueva York), Loretta Preska, cuando falló contra el Estado nacional en el juicio que se tramita en los Estados Unidos por la reestatización de Yacimientos Petrolíferos Fiscales (YPF) y ordenó pagar una indemnización que podría llegar hasta casi los U$S 20.000 millones.

En la ocasión, Preska aseguró que "los demandantes eran tenedores de valores de YPF en los momentos necesarios y, por lo tanto, tienen derechos contractuales exigibles frente a la República" y que también merecían una "sentencia sumaria contra la República por sus reclamos por incumplimiento de contrato". La jueza indicó en ese contexto que las pretensiones de los demandantes son válidas según la ley local, la que usó para juzgar el caso.

"La República prometió a los tenedores de valores que les proporcionaría una salida compensada si recuperaba el control sobre el número requerido de acciones", mencionó Preska en la sentencia.
Once años después de iniciado el reclamo judicial en los estrados de USA, los millones que dispone Preska en compensación económica, serán para el fondo Burford, que compró derechos de litigio.

"Burford Capital no fue víctima de ninguna expropiación cuando el gobierno de Cristina Fernández de Kirchner oficializó la recompra del 51% de las acciones de YPF en 2012, sino que se trata de un fondo que recompró los derechos de litigio a otros acreedores, entre ellos el grupo Petersen, conformado por empresas argentinas." https://www.tiempoar.com.ar/economia/jueza-eeuu-fallo-argentina-ypf/amp/

Más allá de la relevancia que ha tomado la noticia dada a conocer por el propio Gobierno luego de la decisión de la jueza estadounidense, existe la profunda preocupación de la consonancia entre estas maniobras perjudiciales para el país y la cercanía ideológica de la oposición, deseosa de privatizar a las empresas estatales, que conforman el sector estratégico en materia de energía. La primera mirada a la que estamos obligados, quienes sostenemos la defensa de la soberanía energética, es aquella que debe estar atenta a las maniobras internas que abren posibilidades peligrosas sobre el destino de nuestros recursos.

Es propicio recordar aquella intención que, en el 2015, Aranguren mediante, el macrismo dejó en claro cuando, en absoluto desprecio sobre las empresas estatales se proponía la entrega de las mismas a los grupos "amigos" foráneos.

Desde el OETEC, se alertó sobre la debacle que luego padeció el pueblo argentino hasta el 2019, el empobrecimiento que implicó para el país y las tremendas consecuencias que debieron pagar, los más humildes hogares argentinos, ante las empresas que impunemente gozaron de todas las herramientas posibles, para las atrocidades cometidas mediante el acceso restricto a la energía.

Para eso, Macri, actualmente aspirante a asesor del candidato "libertario", había fijado una sistematización para cumplir con objetivos que perjudicaran, a YPF pretendiendo endeudarla, sabotearla desde adentro, además de apuntar a reducir su cuota de mercado, abandonando las inversiones con el fin de la caída en su producción, como también perjudicando el horizonte de sus reservas y debilitándola frente a las empresas competidoras. El plan lo tienen, lo conservan y si es preciso, lo perfeccionarán.