Los números a los que llegó la recaudación tributaria superaron en un 6,7 por ciento la meta que la AFIP se había fijado para el año 2014 en 1.095.866 millones. Entre los impuestos que encabezaron las subas se encontraron Ganancias, IVA, Seguridad Social y Derechos de Exportación.

Según el Ministerio de Economía de la Nación, la expansión de los recursos tributarios fue altamente positiva si se considera la existencia de un contexto externo desfavorable atravesado por la caída de los precios internacionales de las materias primas y por el bajo crecimiento de los principales socios comerciales del país. En este sentido, el dinero que ingresó al Estado a nivel impositivo durante todo el 2014 tuvo un rol importantísimo a la hora de facilitar el sostenimiento de diferentes políticas de inclusión social que apuntaron, entre otras cuestiones, a mejorar el poder adquisitivo de los sectores económicamente más rezagados, a permitir la creación de nuevos puestos de trabajo y a desarrollar políticas de acceso a la educación y la salud públicas para más argentinos.

La cartera económica destacó en un reciente informe que en el marco de las políticas sociales que el Estado se encuentra implementando desde hace un tiempo atrás cobran una relevancia vital la Asignación Universal por Hijo y por Embarazo para Protección Social, el Plan Argentina Trabaja, Pensiones No Contributivas a la vejez, invalidez y madres de más de 7 hijos, entre otras. En este sentido, el Ministerio de Economía resaltó que "la Asignación Universal por Hijo se incrementó desde junio un 40% y las Pensiones No Contributivas un 30,47% en línea con el aumento de los haberes jubilatorios" y además destacó "el Programa de Respaldo a Estudiantes de Argentina (PROGRESAR) del cual ya son beneficiarios 570 mil jóvenes entre 18 y 24 años y la implementación de la nueva moratoria previsional por Ley 26.970, con la que se busca la universalizar el sistema previsional argentino alcanzando especialmente a los sectores de menores ingresos". De esta manera, el aumento en el nivel de recaudación impositiva no sólo posibilitó mantener en funcionamiento programas y políticas que ya se encontraban en plena vigencia sino también ampliarlos hacia un mayor número de ciudadanos.

Con seguridad podemos afirmar que uno de los fines más importantes de la recaudación tributaria a nivel nacional es el de empoderar económicamente al Estado para que éste redistribuya ese dinero recaudado hacia las provincias en materia de obras y políticas sociales. Lamentablemente, algunos sectores de la oposición política-mediática-financiera no lo han entendido así y prefieren hacer aparecer al sistema tributario nacional como un instrumento de enriquecimiento ilícito utilizado por algún funcionario de turno. ¿Cuántas veces hemos oído hablar de la "Caja K"? ¿Cuántas veces se ha sostenido que Etchegaray le entrega en mano a Cristina Fernández el dinero recaudado vía AFIP para que esta última se encargue de rellenar alguna bóveda santacruceña? Argumentos de la profundidad de una pelopincho diría Aníbal Fernández. La finalidad de divulgar este tipo de payasadas es debilitar al Gobierno Nacional y hacerles creer a los ciudadanos que no son parte de la ecuación del Estado cuando, en verdad, son ellos mismos quienes conforman la base estatal.

Como hemos señalado en varias oportunidades, el Estado es con la gente adentro, de lo contrario no habrá más que instituciones vaciadas y sin sentido. Lo mismo sucede con los impuestos: en un Estado con la gente adentro, lo que se recauda a nivel tributario tiene por objetivo servir a los intereses generales de la nación a través de la implementación de políticas sociales orientadas a mejorar la calidad de vida de más argentinos.

Siguiendo esta línea de pensamiento y frente a la desinformación generada desde algunos medios de comunicación, cabe realizar un análisis global del desenvolvimiento de los impuestos mencionados con anterioridad. Tomando sólo en cuenta el mes de diciembre de 2014 la recaudación de Ganancias subió 51,6 por ciento; los Aportes Patronales saltaron a 38,6 por ciento; el IVA aumentó a 35,9 por ciento y los Derechos de Exportación se ubicaron en 69,7%, datos arrojados en comparación al mismo mes de 2013. Respecto al período 2014 en su conjunto, la recaudación del IVA aumentó un 33 por ciento llegando al número de 331,202.8 millones de pesos; el Impuesto a las Ganancias creció un 45,5 por ciento recaudando un total de 267,075.1 millones de pesos; los Aportes Personales tuvieron un alza del 30,4 por ciento registrando una recaudación de 119,431.3 millones de pesos y las Contribuciones Patronales aumentaron un 29,9 por ciento llegando a los 173,511.0 millones de pesos. Por otra parte se destacaron también los Derechos de Exportación con una suba de 51,6 por ciento representando un total de 84,088.2 millones de pesos y la recaudación por Créditos y Débitos en Cuenta Corriente que subió un 35,8 por ciento ubicándose en unos 76,739.8 millones de pesos. ¿Qué nos muestran estos números cuando pasamos al plano del análisis político, económico y social? Un mejor desempeño de la economía nacional que permite recaudar un mayor número de dinero el cual vuelve a la sociedad en forma de obras y políticas públicas.

Si tomamos en consideración cada uno de los impuestos mencionados nos topamos con que la suba en su porcentaje constituye una consecuencia directa del mejoramiento económico, sobretodo en el último trimestre del año. En tal sentido, el aumento del IVA responde a un incremento en la capacidad de consumo de la población -en muchas ocasiones incentivado por el mismo Estado mediante políticas de acceso al crédito como por ejemplo el Programa de Fomento al Consumo y la Producción "Ahora 12"-; el aumento en la recaudación de Ganancias se debe al mayor pago de retenciones y percepciones generado por las subas en el poder adquisitivo de los argentinos; los Aportes Personales y las Contribuciones Patronales subieron como consecuencia del aumento de los salarios y el sostenimiento del empleo; los ingresos por Derechos de Exportación aumentaron gracias a que se declaró un mayor monto de exportaciones de productos agrícolas.

Como se dice popularmente, "todo tiene que ver con todo": la suba en la recaudación tributaria es una consecuencia de la buena marcha de la economía argentina, lo que permite a su vez la implementación de políticas públicas tendientes a mejorar la calidad de vida de un mayor número de ciudadanos. Se trata del círculo virtuoso de una economía que se retroalimenta impulsada desde el propio Estado. El rol que ocupan las políticas de sostenimiento y expansión de la demanda agregada en el incremento de la recaudación tributaria y en la mejora económica general es lo que ciertos medios de comunicación pretenden ocultar.

En el país virtual en el que vive la corporación mediática opositora cualquier mejora económica parece no estar relacionada con ninguna política de Estado y todo tiende a explicarse vía inflación. Algo similar ocurre cuando leemos en Clarín o escuchamos en Radio Mitre que el récord turístico en la Costa Atlántica responde al "cepo cambiario". Como bien dijo la Presidenta Cristina Fernández en su cuenta de Twitter, para la oposición "las cosas buenas en la Argentina son culpa de las cosas malas que hace el gobierno", razonamiento rebuscado el de los gurús del desánimo. Afortunadamente para todos nosotros, los datos duros del país real nos muestran un escenario muy distinto y bastante más sencillo: si en la Argentina se recauda y se viaja más es porque a los argentinos les va mejor que antes.